jueves, 21 de julio de 2011

Recordando a Facundo

Recordando a Facundo, quien de seguro, está feliz con Jesús y Sarah:

Dejó la escoba, se lavó las manos, siguió cantando pero muy bajito. / No se peinó ni lavó los pisos; se quemó el pastel, se cambió el vestido. / No leyó los diarios y cerró los libros, al final de cuentas, siempre es lo mismo. / Apagó la radio, encendió las velas y al llegar la noche se durmió contenta. / Temprano en la mañana se levantó radiante y escribió con dentífrico en el espejo del baño su nuevo apellido. / Alzó la copa, la copa vacía, y brindó con nadie, llena de alegría. / Le dijo un verso, un verso de Whitman a la golondrina que pasó de prisa. / Entre las cortinas se perdió bailando, intentó una mueca, terminó llorando; tuvo mucho miedo pero fue muy lindo: / A las seis en punto, María tuvo un niño”.